Valentino Rossi: su futuro ya no está en sus manos

La presentación del equipo Petronas Sepang International Circuit dejó muchas cosas, una de ellas ha sido que han sabido explotar la presentación a lo largo de 3 días. Vamos a centrarnos en lo que en la primera jornada nos dejó la intervención de Razlan Razali y Wilco Zeelemberg.
Concretamente nos fijamos en cómo han tratado la figura de Valentino Rossi, las expectativas que en él tienen y, sobre todo, cuál es su compromiso con el que otrora fue ‘el Mesías’ de MotoGP. Y utilizo con toda la intención esa expresión porque es muy comparable al pasaje en que negaron sus apóstoles al dios de los cristianos.
Por ejemplo, en lo deportivo fue muy claro Wilco Zeelemberg cuando fue preguntado sobre las expectativas de rendimiento de sus pilotos: “Sí, las expectativas sobre Franco Morbidelli son más altas que las que tenemos de Valentino Rossi”, por lo que la figura de Valentino Rossi ha perdido aquella posición de piloto predominante y de guía para cualquier equipo.

Pero quién más señales dejó sobre el futuro del piloto que ha sido nueve veces campeón del mundo fue el Team Principal del equipo, Razlan Razali, que puso en valor el poder del equipo y un nuevo amanecer en su relación con Yamaha.
Han pasado de ser un firme candidato a firmar con Suzuki como equipo satélite, a estar negociando desde el pasado mes de diciembre con Yamaha y recibir una oferta de colaboración que va más allá de lo que han tenido desde su llegada a MotoGP.
“Estamos hablando con Yamaha para continuar la colaboración, y no sólo hablamos de la especificación de la moto, sino que hablamos de jóvenes pilotos. Finalmente han reconocido que somos un equipo que desarrollamos pilotos de Moto3, Moto2 y hasta MotoGP. Ahora Yamaha se quiere involucrar desde la categoría más baja, incluso desde el campeonato asiático, el campeonato japonés de superbikes, porque así de profunda quieren que sea nuestra colaboración más allá de 2022”.
Ha habido un giro copernicano en los planteamientos de Yamaha con el equipo de Razali. Teniendo en cuenta que el mayor mercado para las motos es el sudeste asiático, quien esté con el SIC Petronas tendrá la llave para dominar el mercado en esa zona del planeta. Probablemente un incremento de ventas mayor del que puede aportar a día de hoy el “sello Rossi”.

El malasio espera tener cerrado el acuerdo con Yamaha entre los meses de mayo y junio, aunque no se cierra a la posibilidad de escuchar a otras fábricas asegura que su objetivo es la continuidad con Yamaha porque es lo que más le interesa a Petronas, patrocinador principal con el que también está negociando la extensión de su relación.
Esa relación con Petronas le proporciona el músculo financiero que le pone en situación de ventaja para negociar, en este caso con Yamaha, a quien ya le ha puesto límites en el trato para acoger a Valentino Rossi en su garaje; sólo dos miembros de su equipo y no alterar el box, heredando el lado de Fabio Quartararo, el lado contrario al que estaba acostumbrado.
Pero no se queda ahí Razali, cuando explica que de no haber sido por la pandemia habrían valorado otras opciones más allá del de Tavullia: “Por la pandemia la opción de tener a Valentino ha sido mucho más viable. Si hubiese sido un año normal habríamos mirado también otros pilotos”.
Quizá lo más sorprendente fue cuando, además de lo anterior, añadió que el haber firmado a Valentino Rossi ha sido una excepción en su política de promocionar jóvenes talentos: “Valentino puede aportarnos estabilidad y resultados, cuando está relajado y contento con la moto. Y por eso hemos hecho esta excepción este año con Valentino”.

Y a partir de ahí se soltó en el momento de responder sobre qué debería pasar para que se diese la renovación de un piloto que no cumple la política del equipo. Desveló que existen unos requisitos mínimos, en forma de resultados, para iniciar conversaciones de renovación.
“Tendremos que ver carrera a carrera, como con cualquier otro piloto. Los resultados de las 6 ó 7 carreras son cruciales para ver dónde está, y Valentino es experto y hará una evaluación de sí mismo para decidir qué hace. Sabemos que su contrato con Yamaha fija claramente los objetivos que tiene que conseguir para hablar de su continuidad”.
Además de desvelar esa parte de contrato que hasta ahora sólo se suponía, o de apelar al criterio del propio piloto, se distanció de la responsabilidad de tener que mantener la plaza del astro italiano con el argumento de la incertidumbre que las renovaciones en curso provocan.
“terminamos contrato con Yamaha y con Petronas aunque estamos en conversaciones con los dos para renovar, y por eso no nos podemos comprometer con Valentino más allá de este año”.

Sin embargo, al margen de todos esos argumentos, su mismo equipo ha firmado por dos temporadas la renovación con Franco Morbidelli. Parece que para el subcampeón del mundo no aplica la misma problemática que argumenta Razali para Rossi.
Uno reflexiona sobre cómo fue la negociación del paso del equipo oficial al satélite para Valentino Rossi, y recuerda que fue más largo que la bufanda de Penélope. Quizá por la diferencia a nivel personal entre Razlan Razali y Valentino Rossi, o por la diferencia de objetivos, o quién sabe si por una cuestión de cómo ve el futuro cada uno.
Valentino Rossi sabe que esta vez ya no le bastará verse competitivo y con ganas de seguir para decidir su futuro; ahora son otros los que deciden si quieren concederle un futuro.
Aún con todo en contra, al piloto le quedaría un último recurso: apostar fuerte por quedarse con dos motos para la VR46 y ocupar uno de sus asientos, pero se hace difícil ver que esa opción fuese con Yamaha.