Las Notas del #CatalanGP
Sobresaliente deportivo: La absoluta demostración de poder de Fabio Quartararo en el Gran Premio de Catalunya va más allá de una victoria que se podría ver venir sabiendo que Montmeló es uno de los circuitos favoritos del Campeón de MotoGP, es un puñetazo en la mesa del resto de pilotos que aspiran a ser ganadores, en la mesa de los medios que buscan desesperados un líder al que referirse y no somos capaces de ver que lo tenemos en los putos morros. Fabio está reclamando el lugar que se le viene achacando desde que tenía quince años, el de anti-Márquez o en su defecto, el de su sucesor.
Moto con poquita potencia (aunque esto en Yamaha nunca ha sido algo que le haya impedido ganar), piel de cordero, educación exquisita, concentración hasta la última vuelta (y esto es bastante importante), y público propio: hay que estar un poquito ciergo para no ver la cantidad de aficionados franceses que fueron a Montmeló a cantar la Marsellesa a pie de podio, una imagen que nos trae recuerdo amarillos.
Sobresaliente: La homologación FRHPhe-01, también conocida como la homologación FIM para cascos que se utilicen en competición, una legislación bastante exigente que incluso obligó a algunos pilotos a competir con casos homologados disfrazados con la marca que les patrocinaba porque estas marcas no cumplían, en aquel momento, esta legislación.
Al final esta legislación pide, entre otras cosas, que la resistencia a impactos sea multipunto, es decir, en puntos al azar y no en puntos determinados como hasta ahora. Ojo a los cascos de calle que se verán afectada por la nueva legislación (ECE R22-06) en breve, subirán las fibras que lo componen, los pesos y los precios, pero visto lo visto con lo que le pasó a Takaaki Nakagami durante la salida del Gran Premio de Catalunya, qué queréis que os diga. Es que, independientemente de si Nakagami se coló en la salida o no, se llevó dos golpes muy fuertes en la cabeza, uno contra la goma de Bagnaia y otro de rebote contra su propia moto tras salir expulsado del golpe con la Ducati.
Este es un deporte de riesgo, cada vez que uno coge la moto para divertirse el factor adrenalina es indudable, ese vacío en el estómago que te dura varios días con la consiguiente insatisfacción de querer más no es más que el riesgo que se corre con ella. Por ello, todo lo que sea seguridad derivada de la competición, bienvenida sea.
Notable: Cómo nos gusta cada vez que viene aire fresco, y esta vez lo trajo David Muñoz (BOÉ Motorsports), con un segundo puesto conseguido con la ayuda de Dirección de Carrera (excedió los límites de pista en la última vuelta pero ya sabemos, a la hora del cortadito no se sanciona), que no desmerece ni mucho menos la carrera que se marcó. Y aunque fuera una carrera lenta como apuntaba Izan Guevara, lo cierto es que fue el único que pudo medio intentar responder al tirón que Guevara dió en las últimas vueltas. Muy bien también el wild card David Salvador con el Max Racing. Salvador es el piloto que en principio iba a ocupar la plaza de Ana Carrasco en el BOÉ, pero por lo que uno se ha enterado, si no mantuvo esa plaza fue más por una mala gestión de su entorno que por un empujón.
Gracias Izan por el tirón y mantener el nível que Moto3 está demostrando este año, una rapidez que nos está dando carreras más limpias, bonitas y disputadas.
Más notables, la dupla del Prima Pramac Racing. Jorge Martín encontró su sitio en Montmeló y reclama su sitio en Ducati, de hecho las múltiples referencias en entrevistas y RRSS sobre la participación de Ducati en su intervención tras el GGPP no me parecen gratuitas. Por su parte, Johann Zarco, el bicampeón del Mundo al que todo el mundo recuerda como «tonto» por intentar parar a Nico Terol con la mano en Misano va en la general pisando los talones del piloto más irregular del Mundo, Enea Bastianini.
Por cierto, si a Zarco, con dos títulos, aún se le estigmatiza con lo de Terol… ¿se está siendo injusto con esta estigmatización a Zarco o con el apoyo desmedido a Aleix Espargaró por su cagada?




Bien: qué poquito se está hablando de Augusto Fernández en 2022. Fernández ha estado en los mejores equipos del Mundial y, probablemente, ahora se encuentre en la joya de la corona. Con la falta de resultados de los últimos años y la presión que conlleva tener que pisar cajón regularmente para demostrar que su llegada al Mundial no fue un espejismo, quizá le esté viniendo bien la desviación mediática dentro del equipo que se está llevando Pedro Acosta, que ha pasado de no gustarle la prensa a presentar libros y hacer tertulias en DAZN.
Podríamos hablar de Vietti y Canet. Del primero está siendo sorprendente lo que hace y de Canet ya dijimos desde estas mismas líneas que sería el verdadero tapado de 2022, pero del que no se está hablando nada, pero nada, es de Alonso López y un nuevo top ten con la SpeedUp. ¿Estamos ciegos como lo del público de Quartararo?




Aprobado: Lo bueno de que Mundial cuente con personajes como Andrea Dovizioso spec 2022 es que nos permite valorar, si nos paramos a pensar, en que hay una serie de pilotos con una entrega y trabajo que hay que valorar. Y entre estos voy a nombrar a Luca Marini por ejemplo, e incluso al mismo Darryn Binder que acaba las carreas que Dovizioso no quiere acabar porque hace calor. Dovizioso, cuyo compromiso con la Ducati ya se ponía en duda desde dentro de Ducati, se plantó en MotoGP vendiendo que iba a luchar por las victorias y está, en el primer tercio, demostrando aún menos profesionalidad que en Ducati y declarando que no quiere competir. Luego que si no hay crisis de pilotos.
Suspenso: Sin entrar en otras desidias doviziosianas como la de Dirección de Carrera, y siguiendo el hilo de la crisis de pilotos referentes (con el permiso de Quartararo, el concentrado de principio a fin), se habla de una rebelión de pilotos que se sienten mal pagados en MotoGP. Y me resulta curioso ver que los pilotos que llegan a MotoGP «al precio que sea» y aprovechando «trenes poco convincentes» se quejen luego de estar mal pagados. A Aleix le pagarán bien, a Quartararo le pagarán bien, y quien sea capaz de volver a llevar a la Honda a la victoria con regularidad le pagarán bien. A los que tienen como objetivo llegar a MotoGP como sea en la plaza que sea, nadie les ha comentado que hay muchos más pilotos que quieren llegar a MotoGP como sea en la plaza que sea, o como se decía hace no mucho, los pilotos son como los autobuses, pasa uno cada cinco minutos.
El mundial está devaluado porque ha devaluado los objetivos. Antes el objetivo era ganar, no llegar a la categoría reina a hacer bulto para una fábrica.