Danilo Petrucci, ¿al WorldSBK en 2023?
Danilo Petrucci es un tipo que cae bien a todo el mundo y hasta el momento se ha ido buscando la vida para permanecer activo en el mundo motociclista de competición, ya sea en asfalto o incluso en raids de larga duración como el Dakar. Que la vinculación entre los diferentes campeonatos es un hecho ha quedado claro desde hace tiempo. La transferencia de pilotos entre MotoGP, WorldSBK, MotoAmérica, BSB, ESBK, etc… empieza a ser una constante y la última muestra ha sido la salida de Iker Lecuona y Xavi Vierge al WorldSBK dentro de Honda Racing WorldSBK.
How hard was Warhorse HSBK Racing @DucatiUSA NYC rider @Petrux9 pushing for fast lap times in his first visit to @roadamerica? Hard enough that he made the @GEICOmotorcycle Save of the Day. #motorcycle #Motorsport pic.twitter.com/9Ebsb8gTDd
— MotoAmerica (@MotoAmerica) June 3, 2022
MotorSport.com publica unas declaraciones de Ciabatti en las que afirma que la posibilidad de recuperar a Danilo Petrucci para el WorldSBK va cobrando cuerpo de cara a 2023. El papel del italiano en MotoAmérica no pasa desapercibido y la ayuda por parte de Ducati es plena, conscientes de la importancia del mercado americano para la firma italiana. Ya el año pasado sucedió algo parecido con Loris Baz. El resultado del francés, apoyado por la extraordinaria sustitución que hizo de Chaz Davies en el GoEleven durante la campaña pasada, hicieron que Baz encontrara acomodo este año, de nuevo, en el WorldSBK, dentro del equipo satélite de BMW, Bonovo Racing.
Siguiendo una estructura parecida en la sucesión de acontecimientos, Danilo Petrucci ha sido rescatado por Ducati para defender sus intereses en MotoAmérica. Los resultados están siendo buenos, tanto que el italiano encabeza la clasificación general, por lo que la mirada de Ducati sobre él ha cambiado y podría ser el que cumpliese el sueño más deseado, ser campeones con un piloto italiano en el WorldSBK.




¿Y qué pasa con Michael Rinaldi? Sus resultados no terminan de ser lo suficientemente consistentes como para haberse ganado la renovación en el equipo oficial. Los dos podios obtenidos en Misano – Resultados Ronda Italiana WorldSBK – no son más que una pequeña tirita en una herida que empieza a ser demasiado grande. Rinaldi llegó al campeonato como protegido de Ducati, era el destinado a ser esa figura joven capaz de conseguir el título y al fin poder «vender» el pack piloto+moto italianos Campeones del Mundo.
Su título en Superstock facilitaba la operación y todo parecía encarrilado. En ese camino, algunos pilotos han salido perjudicados, entre ellos Xavi Forés, que salió del Barni, habiendo hecho una temporada más que destacable, para dejar sitio al italiano, una decisión muy polémica y que resultó un fiasco para todos, Forés fuera del campeonato y el Barni y Rinaldi con unos resultados paupérrimos que ni de lejos se acercaban a los obtenidos por Xavi.
A pesar de todo, Rinaldi ha permanecido en el campeonato, teniendo acomodo en los mejores equipos privados, el último el GoEleven, siempre con cobertura de Ducati de manera oficial, hasta que ha llegado al Aruba.it, donde cumple su segundo año y en el que, probablemente, está gastando su último cargador. El material con el que ha contado el piloto italiano siempre ha sido de lo mejor, con constante apoyo de fábrica estuviese en el equipo que estuviese, probablemente argumento suficiente como para que Barni, esperando grandes resultados que le diesen visibilidad y un estatus preferente dentro de Ducati, optara por Rinaldi descartando a Forés en su día.
El caso es que Petrucci está, una vez más, cumpliendo, esta vez en MotoAmerica y el premio por parte de Ducati puede que sea una retirada más que interesante para el piloto dentro del WorldSBK, más si es capaz de llevar esa Panigale a un ritmo suficientemente rápido como para ganar el campeonato estadounidense. Luego entonces, ¿qué pasaría con Rinaldi? Si el billete de Petrucci para llegar a Europa fuese de ida y vuelta, puede que alguien usara el retorno para adoptar esa Ducati que ha de seguir compitiendo en los EEUU. Quién sabe…